‘Karpas Teatro’, una de las salas con más encanto de los escenarios madrileños, cumple quince años y lo celebra, a partir de septiembre, con una programación de lujo en la que destacan dos obras míticas de la historia del teatro: ‘Bodas de sangre’ de García Lorca y ‘Casa de Muñecas’ de Ibsen.
Hace ya más de cuatro años que visité, por primera vez ‘Karpas’, y desde el instante en que vi a Charo Bergón en la piel de Bernarda Alba, quedé absolutamente fascinado. Me encantó la adaptación de la obra de Lorca por parte de Manuel Carcedo y me enamoré perdidamente de aquella sala y de la revisión que hacen de los grandes clásicos. Debido a mi profesión, he tenido la suerte de ver a las grandes compañías en los teatros más importantes de este país. Con enormes presupuestos y un plantel de famosos actores, el éxito está prácticamente garantizado. Pero, más allá de las grandes cifras y de los montajes espectaculares, en el mundo del arte hay una cosa que es muy difícil de conseguir; el encanto. Esto es como el talento, se tiene o no se tiene. Y ahí precisamente es donde radica el éxito de ‘Karpas’, que es un lugar con encanto. Una vez que entras por la puerta se respira algo especial en el ambiente, te aíslas del mundo exterior y te sumerges en las maravillosas historias que nos ofrece este pequeño, pero al mimo tiempo, gran teatro.