CALIFICACIÓN.- NOTABLE: 7

Quedan únicamente dos funciones para poder disfrutar de ‘LLÁMAME’ en el recién inaugurado ‘ESPACIO GALLINERO’ de Gabriel Olivares. Antonio Hortelano debuta en la dirección con esta comedia que aborda la supervivencia de dos actrices en horas bajas que alzan sus voces para contarnos las dificultades a las que se tienen que enfrentar en su día a día. Marieta Orozco y Marina Campos Albiol protagonizan de forma magnífica esta obra que cuenta con dramaturgia de Paulo García Conde y Sol Aguirre, muy conocida por su blog de humor para mujeres «Las claves de sol».

‘LLÁMAME’ es el primer montaje que se ha estrenado dentro del formato «TXH» (Teatro por Horas) en el Espacio Gallinero. Con este formato, Gabriel Olivares y todo su equipo pretenden que grandes figuras del campo teatral dirijan montajes que tengan como máximo una hora de duración. El elegido para inaugurar este formato ha sido el actor Antonio Hortelano, que debuta en la dirección con este texto escrito por Sol Aguirre y Paulo García Conde, a raíz de una idea original de Marina Campos Albiol y Marieta Orozco.

‘LLÁMAME’ está inspirada en hechos reales y tiene como origen la amistad de más de 10 años entre las dos protagonistas. La obra nace de la necesidad creativa y de supervivencia de dos actrices que quieren contar su verdad, y decir en voz alta las dificultades con las que se encuentran en el camino para alcanzar un mismo sueño, a pesar de tener dos vidas, dos pasados, y dos presentes completamente diferentes. Por un lado, está Marina Campos Albiol y, por otro, Marieta Orozco, ganadora del Goya a Mejor Actriz Revelación en 1999 por su papel en la película «Barrio» de Fernando León de Aranoa. 

La obra comienza con la irrupción de Marieta en el piso de su amiga Marina sin previo aviso y con un par de sacos al hombro. Se ha largado de Ibiza y ha regresado a Madrid con un objetivo claro en mente: recuperar su carrera de actriz. No obstante Marina, también actriz, tratará de hacerle entender que esa es una misión casi imposible. Todo parece jugar en contra de las dos amigas que, sin embargo, toman juntas la siguiente determinación: seis meses. Ese es el plazo que se concederán para intentarlo todo y alcanzar su sueño. Seis meses. Si no lo consiguen, harán sus maletas y dejarán morir su fantasía. Pero, ¿serán su tenacidad y su ilusión suficientes para alcanzar su objetivo? ¿Resistirán todos los golpes que reciban por el camino, o acabarán sucumbiendo como han hecho tantas y tantas otras?. 

Paulo García Conde y Sol Aguirre, muy conocida por su blog de humor para mujeres «Las claves de sol», han confeccionado un texto nada pretencioso y divertido que refleja muy bien la realidad a la que tienen que enfrentarse la mayoría de las actrices (y actores) cuando pasan los meses y no suena el teléfono. Un texto sencillo y fluido en el que echamos en falta algún giro más potente e inesperado. Probablemente, el objetivo de los autores era quedarse ahí y ya está, pero nos hubiera gustado un toque más rompedor, que le diera más hondura a la trama y permitiera un mayor lucimiento a las dos protagonistas que, aún así, son lo mejor de este montaje. Tanto Marina Campos Albiol como Marieta Orozco están estupendas interpretándose a sí mismas, riéndose de sí mismas y usando el humor como mejor arma para combatir los sinsabores de su profesión.  

Antonio Hortelano, director del montaje, ha hecho un buen trabajo en la puesta en escena apoyándose en la escenografía de Felype de Lima y Mario Pinilla -también autores del vestuario- que han construido un pequeño apartamento al que no le falta ningún detalle. Con escasos elementos de escenografía (una mesa, unos cajones de frutas, una pequeña nevera-mueble, un espejo, unos taburetes y poco más), Hortelano nos ofrece una puesta en escena bastante dinámica, moviendo a las actrices por todos los rincones del escenario, y sabiendo sacar lo mejor de cada una de ellas.  

LO MEJOR DEL MONTAJE:

Lo mejor del montaje es la actuación de Marina Campos Albiol y de Marieta Orozco y, por supuesto, la vuelta a los escenarios de esta última. Tras mucho tiempo alejada de ellos, es un placer volver a verla sobre las tablas. Una pena que el papel tampoco le permita lucirse en todo su esplendor al igual que le ocurre a Marina Campos. El texto saca la vena más divertida de ambas pero nos hubiera encantado verlas en otro registro.

LO PEOR: 

Aunque ‘LLÁMAME’ nos ha dejado un buen sabor de boca -eso es innegable-, podría mejorar considerablemente si el enfoque del texto hubiera sido más amplio. A nuestro juicio, lo más flojo del montaje es precisamente el texto o, mejor dicho, el enfoque que se la ha dado a este. Probablemente, el objetivo inicial de los autores era reflejar esa realidad (y las dificultades a las que se tienen que enfrentar las actrices cuando nadie las llama) desde un punto de vista fresco y divertido. Y eso está más que logrado. Y nos gusta. Pero, una cosa es apostar por el humor y, otra, es quedarse en la superficie. La obra pide a gritos que se profundice más en los personajes, que en un momento dado nos toque la fibra y que, aparte de reírnos con ellas, también consigan emocionarnos con todas las miserias que conlleva la profesión de actriz en horas bajas. 

Aldo Ruiz

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