CALIFICACIÓN: 6’5
‘Quitamiedos’, que se representa hasta el 14 de marzo en el Teatro de la Abadía, es la nueva obra de Kulunka Teatro. Un drama sobrenatural y fantástico, escrito y dirigido por Iñaki Rekarte, y protagonizado por Jesús Barranco y Luis Moreno.
Tras tres joyas como son ‘Edith Piaf: Taxidermia de un gorrión’, ‘Solitudes’ y ‘André y Dorine’, Kulunka Teatro ha presentado su nuevo montaje en la Abadía, una obra que lleva por título ‘Quitamiedos’ y que está protagonizada por dos personajes muy especiales: una persona que acaba de morir y su ángel de la guardia. Una curva de una carretera comarcal, con un quitamiedos roto después de un accidente de tráfico, es el espacio elegido por Iñaki Rekarte para recrear esta historia. El dramaturgo nos presenta una visión muy singular de la muerte y los datos de una biografía (la del accidentado) cuyas piezas no acaban de encajar en la versión oficial de lo ocurrido. Pero, además de todo eso, ‘Quitamiedos’ cuenta una historia de amor con dos amantes muy particulares: uno que amó idealmente y otro, que lo hizo con todas sus contradicciones.
La idea de la obra es realmente original y genial en su concepto; Rekarte nos cuenta este drama sobrenatural con grandes toques de comedia negra. Sin embargo, a la hora de desarrollar la historia, hay elementos que no terminan de encajar o que resultan asombrosamente increíbles, especialmente en la recta final del montaje. Bien es cierto que Kulunka plantea una obra sobrenatural y de género fantástico, un código que no es fácil de llevar a las tablas y que no es ‘apto’ para todos los públicos. A pesar de eso, a nosotros nos ha encantado el planteamiento, la concepción de los personajes y esa atmósfera tan mágica que logra crear Iñaki Recarte, sin embargo, a medida que va transcurriendo la trama y la evolución de los dos personajes, va perdiendo fuerza la historia, al menos eso es lo que nos ha ocurrido a nosotros.
Uno de los puntos fuertes del montaje es, sin duda, la puesta en escena, que sustenta en la espléndida escenografía de Ikerne Giménez, que ha logrado recrear a la perfección la curva de una carretera comarcal, que tiene un quitamiedos roto a causa de un accidente de tráfico. La escenografía es una parte fundamental en la puesta en escena. Fantásticos también son el espacio sonoro y la composición musical de Luis Miguel Cobo, al igual que el diseño de luces de Javier Ruiz de Alegría.
Jesús Barranco y Luis Moreno son los protagonistas de ‘Quitamiedos’. Ambos realizan un trabajo impecable y muy complejo dado lo especial que tienen sus dos personajes. Luis Moreno interpreta a un conductor, de 39 años, que tiene un accidente de tráfico y que muere trágicamente. Jesús Barranco, por su parte, se mete en la piel de su ángel de la guardia. Él ha estado toda la vida cuidándolo y, quizás, enamorado platónicamente. Esa noche fatídica para uno, es mágica para el otro que, por fin, podrá darse a conocer. Los dos actores realizan unas actuaciones muy convincentes pero es Jesús Barranco, como ángel de la guardia, quien acaba llevando el peso de la historia.
En definitiva, ‘Quitamiedos’ es una obra muy sugerente, especial y totalmente diferente a todo lo que existe actualmente en la cartelera madrileña. Pero, desde luego, es un montaje que dista mucho de la genialidad de las obras anteriores de Kulunka Teatro.
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